Utrera, 28 de diciembre de 2025

El CD Utrera ha sacudido el mercado de invierno (y los cimientos de la lógica futbolística) con un anuncio que ha dejado a la afición perpleja: Rubén Cruz Gil, el legendario delantero utrerano, regresa al club para solucionar la alarmante falta de gol del equipo.

Tras una reunión de urgencia esta madrugada, el presidente Ramón Sánchez y la directiva han tomado una medida desesperada. «Necesitamos gol, experiencia y, sobre todo, que el balón entre», declaró Sánchez, visiblemente nervioso. «Hemos probado con delanteros jóvenes, con fichajes prometedores, pero la portería se nos resiste. Solo un ídolo local puede obrar el milagro».

Un fichaje «exprés» y con condiciones inusuales

Rubén Cruz, quien actualmente se encontraba disfrutando de su merecido retiro del fútbol profesional, ha aceptado el desafío. Sin embargo, su vuelta viene con condiciones peculiares:

• Entrenamientos flexibles: Solo asistirá a los entrenamientos los martes y jueves, y si no llueve.
• Contrato por objetivos: Su salario dependerá del número de goles que marque, pagándose cada gol con una caja de las famosas tortas de Utrera.
• Cláusula anti-VAR: Se ha incluido una cláusula especial para que sus goles no puedan ser revisados por el VAR en caso de ascenso a Segunda RFEF.

La afición del Utrera ha reaccionado con una mezcla de incredulidad y esperanza. Mientras algunos preparan pancartas de bienvenida, otros revisan si esto es parte de la promoción de entradas del club.